Humano Método.
Tengo demostrado que vivo. Porque cruzo mutilados caminos por donde otros látigos dejaron su método. Reinvento huellas para poder escaparme o encontrarme luego anclado en cualquier desayuno. Sometido al dolor del sol, a la mañana despiadada bañándome de rendijas el alma. Muerdo un silencio que al instante salpica el grito. Una bocina cruje cercana, le arrojo mi silbido para ver si gano esta pelea. Pido alas a un pájaro que atina a mirarme con gesto comprensivo. De vez en cuando suspiro, exhorto al perro para que me regale un sueño. Miro mis manos, aplaudo como loco me aprieto el pecho, invoco a la duda pero nada surte efecto. Ser humano francamente ya no tiene ningún sentido. Derechos Reservados de autor 2012 Héctor Delaloye Echavarría