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AS-SALAAM ALAIKUM

Camina, tus pies se hunden en cenizas y temblorosas ausencias, sobre espejos de sangre virgen y despojos que aún exhalan ululantes estampidos. Camina, Amir, ¿Puedes sonreír? Un abanico de vitoreos te marca el regreso de norte a sur. Enreda en tu cuello la kufiya de algún padre muerto, alza la thobe de madre desaparecida y el dinamitado mintiyan de tu hermano sepultado. Camina, Amir, no existe sed ni frío, no hay tristeza ni viento fúnebre, no más resequedades polvorientas ni pájaros alados de la muerte. camina y sonríe, sonríe y camina, en casa alguien espera, Amir, as-salaam alaikum,

Destiempo

El tiempo se agota llorando sobre ruinas, no habrá nada después, el puente en huesos, la luz sangrando pergaminos sobre el horizonte. La desnudez retrocede hacia el fondo de la calle buscando agua, arroz, una compasiva razón para los muertos. Es ahora, no hay tiempo, los relojes se cansan de dar las horas sobre osamentas.

Sudorosa Paz

  ¿Cómo pueden mirar una estrella y no fugarse? Digo ¿Qué hacen para aliviar tanta monotonía uniforme, ese apego inmoral por lo torpe disfrutando solubles barbarismos? ¿Cómo hacen para abrir las manos sin esperar un desborde celeste, una sinuosa mariposa iracunda que ascienda suavemente entre sus penas? ¿Cómo viven en sudorosa paz uniforme, con sus sábanas automáticamente acicaladas y la sonrisa cerrada oportunamente como un balance? ¿Quién los obligó al mecanismo estentóreo, a la queja sublimada acurrucada en los bolsillos, con el dolor acoplando su risa a lo pavote y esa pirueta virulenta endulzándoles un absuelto café? ¿Cómo hacen para existir bajo tanto asombro  y sin alegría? ¿Sin una una bendita alegría? Poema premiado en Alicante (España) y por Editorial Converso (Buenos Aires)

Agostos

A veces sucede que agosto es un mendigo pasando una mano fría por las paredes, desprendiendo recuerdos como telarañas asidas a la memoria. Viene a mis refugios, desciende, me ausculta, me conoce, y sabe también que mis delirios terminan siempre en primaveras.

En Un Parpadeo

¿Te deshizo la memoria en un parpadeo? ¿Alguien hizo naufragar tu silueta en algún abismo desconocido? No encuentro los espejos que te dibujaban, mi soledad ha quedado sola, los compromisos líricos se han mudado adonde el tiempo invita a jugar con los muertos. ¿Te ha capturado un desconocido abandono, alguna mano cósmica borró tus huellas del exilio? ¿Dónde guardará mi alma tantos fríos recuerdos?

Destierro

Me desvela un nombre, hago jirones de sal con la angustia. voy exiliando palabras que no duermen.   Dentro de mis ojos, otros ojos.

REFUGIO

La amplitud se adhería  a las formas, superficies y contradicciones que no vacilaban en suicidarse. Allí viene  una sombra a poblar la otra, ahora un silencio obteniendo  alas. Más allá, inquebrantable, mi pensamiento  intenta arácnidos  refugios.